El Conjuro 4: la película de terror más familiar

Si eres fan del terror, de lo demoníaco y de los buenos sustos, seguramente te habrás llevado una gran decepción al ver esta película. Lejos de lo prometido, ha sido catalogada por muchos como un “drama familiar” más que una cinta de terror, pese a pertene

El Conjuro 4: la película de terror más familiar

cer a la saga más taquillera del género.

Con el paso de los años, la narrativa de las historias que en un inicio provocaban verdadero pánico en los espectadores ha ido perdiendo fuerza. El Conjuro 4 es, quizá, la muestra más clara de esta decadencia.

La trama gira en torno a Judy, la hija de los Warren, quien está a punto de casarse y debe lidiar con su “don” de percibir fenómenos paranormales. Al mismo tiempo, la pareja intenta resolver el caso de una familia atormentada en Filadelfia, aterrorizada por tres almas en pena controladas por un demonio.

Desde el inicio, la película enfatiza la relación entre Judy y su madre. Además, introduce un mensaje motivacional sobre “afrontar las cosas” en lugar de huir. Este discurso se refleja en la propia historia de los Warren, quienes, tras enfrentarse a un demonio atrapado en un espejo, deciden retirarse de la vida paranormal debido al nacimiento de su hija y a la enfermedad cardíaca de Ed Warren.

Pero, ¿es eso lo que realmente queremos ver en una película de terror? ¿Un drama familiar con tintes motivacionales?

Para los fieles seguidores del horror, la respuesta es clara: no. Y es que El Conjuro 4: Los Últimos Ritos, dirigida por Michael Chaves, termina reduciéndose a un par de sustos previsibles, personajes poco desarrollados y contadas escenas de verdadero suspenso.